Hoy vengo a compartir contigo los ingredientes perfectos para una receta navideña infalible.
Tenía ganas de preparar un pequeño proyecto de bordado de lana sobre lana para amantes del crochet.
Después de los últimos talleres de bordado para tejido de dos agujas, sentí que, en lugar de utilizar lana, me apetecía más utilizar la seda.
Tras un proyecto primaveral y otro otoñal, era el turno de algo navideño.
Algo rápido y sencillo, en cuanto a dificultad de puntadas, pero un reto para adaptarlo a una base tejida con ganchillo.
Como yo no soy experta en crochet, le pedí una ayudita a Pilar. Generosa como es ella, no tejió una muestra, ni dos... sino tres!
La cosa es que, lo que probablemente iba a ser un objeto cotidiano (no te lo desvelo de momento), acabó convirtiéndose un ornamento navideño.
A partir de una pieza tejida en círculo, fui aprovechando la guía que me ofrecían las sucesivas vueltas del tejido.
Chenilla de seda en dos colores, hilos metalizados en diversos tonos navideños, lana merino y cinta de seda.
Una combinación de texturas que se han adaptado maravillosamente a la base tejida.
Una muestra de que técnicas y materias tan dispares a priori, pueden hacer un "match" sorprendente.
Como ya te contaba hace unas semanas en mis historias de Instagram, este año he decidido proponerte las cintas de seda para bordar en los dos colores clásicos navideños, en un formato diferente.
Y es que cada año, desde inicio de diciembre, las existencias de ambos tonos se agotan rápidamente, por lo que a partir de este año (sólo para rojo degradado y para verde degradado) ya puedes hacer tu pedido POR METROS, y ya no sólo en las habituales cajitas de tres metros.
A estas alturas ya habrás deducido qué colores metalizados he utilizado... por si tienes dudas, te dejo aquí y aquí los enlaces.
Es probable que el menos conocido de los hilos que he utilizado aquí sea la chenilla de seda. Un material delicado cuando no se utiliza con el cariño y conocimiento necesarios, pero espectacular cuando has aprendido a utilizarlo correctamente, otorgando ese toque de terciopelo que forman sus pelitos.
Si te apetece probarla, combinada con los hilos y cintas que antes te he propuesto, te cuento que yo he utilizado menos de medio metro de cada color, y que la tienes a tu disposición por metros aquí.
Perfecta para aplicar a tu bordado tejido con un sencillo punto de Bolonia, combinada con hilo de lana, seda, o metalizado.
Como toque final (y para adecentar un poco la presencia del adorno en su parte trasera) una pieza de fieltro de lana, en un color acorde con la gama elegida, y ya tendríamos nuestro adorno floral navideño bordado en seda sobre lana.
Espero que todo esto te haya servido de inspiración y de guía para escoger los materiales más adecuados para tus trabajos creativos.
Con cariño,
Eva